Las relaciones sexuales en una pareja pueden verse afectadas por múltiples factores: paso del tiempo, discusiones, llegada de los hijos, cansancio, carencias afectivas… Estos elementos generan desencuentros en la intimidad y, en cascada, problemas relacionales. Cuando la comunicación está bloqueada o hay reproches cíclicos, es útil trabajar primero los conflictos de pareja para crear un terreno seguro donde abordar la sexualidad.
Consultar con un psicólogo de pareja en Barcelona o con una sexóloga en Barcelona especialista en terapia de pareja puede ser el primer paso para encontrar soluciones reales y sostenibles. Si además existe herida de confianza o sospechas, conviene integrar una terapia de pareja por infidelidad, coordinando el trabajo emocional con el abordaje específico de las dificultades sexuales.